Los primeros siglos de Inglaterra

Los primeros homos en las islas datan de la prehistoria, fue el homo erectus, esto fue gracias a la última glaciación de la Tierra que unía la Isla con el continente. Hace quinientos mil años estuvo el homo heidelbergensis, también llegó a la Gran Bretaña, hace doscientos treinta mil años llegó el homo neanderthelensis y hace cuarenta mil llegaron los humanos, es decir, el homo sapiens, siendo en teoría vecinos del homo neanderthelensis y una de las ultimas partes de Eufrasia en llegar. Al terminar la glaciación gran Bretaña quedó una isla, el número de los primeros humanos aumentó, se empezaron a crear los primeros establecimientos hacia el 4500 a. C y ya por el 3500 a. C. ya había actividades agrícolas o el trabajo de la arcilla.

Por mar llegaron más humanos que llevaron nuevas actividades como la ganadería, el cultivo de trigo o la fabricación de cerámica, en plenos inicios del neolítico. Destacan los primeros asentamientos como el de Windmil Hill, datan rituales con sepulcros muy extensos como el de West Kennet. Ya se hacían las primeras grandes estructuras como el Stonehnge, el Woodhenge o el yacimiento de Durrington Walls.

En el inicio de la Edad de los Metales, en la Edad de Bronce, también ya fabricaban armas de metal e instrumentos, naturalmente primero con cobre y luego con bronce, además se comerciaba mucho con el estaño dado que había bastante en la isla. Estaban las culturas del vaso campaniforme por lo de los vasos de forma de campana y la cultura de la Wessex donde se experimentaba con la creta.

En la Edad de Hierro, por el año 800 a. C. llegó de Europa meridional el hierro, algo más abundante y resistente que los anteriores. Con el hierro llegaron los celtas que se habían extendido por casi toda la isla y que habían traído mucho de su cultura, actualmente existen muchas de las lenguas celtas como el galo británico que dio origen a lenguas como el galés y el bretón y por el lado modélico el irlandés y el escoces. Trayendo nuevas actividades y tecnología. Se dividían en grupos muy bien organizados como la de los sacerdotes que practicaban paganismo o la clase baja, lo esclavos y trabajadores. Incluso había mujeres guerreras notables. Había conflictos sociales por la isla, especialmente con los que se llamaban pictos por el norte que se vieron obligados a construir fortalezas como el Castillo Maiden, el Castillo Chún o el de East Lomond. Por estos años el griego Piteas de Masalia tuvo embarcaciones que llegaron a la isla, gracias a él hay más información como los nombres de los pueblos británicos del tiempo.

Hachas de bronce en Gran Bretaña en la Edad Antigua | Creditos: Wikimedia Commons

 

Por el año 175 a. C. llegaron los belgas de la Galia (parte de la actual Bélgica y algo de Francia) que le dieron fuerte a la minería y la producción de jarrones, juntándose con los britanos y extendiendo el comercio de Britania y atrayendo a los romanos.

Britania como provincia romana

En todo esto, por el año 56 a. C., el poderoso Julio Cesar se encontraba en guerra la Galia, y los belgas que migraron produjo un interés para Roma, así pues, decidió hacer una expedición para visitar a los celtas que estaban en Britania. En el 55 a, C. hizo otra expedición y tuvo que enfrentarse a los Casivelono que venían de desterrar al rey de los trinovantes, la tribu de Britania más poderosa de la época. Pese a salir derrotados, Cesar se marchó a la Galia.

Pasaron años de prosperidad para Britania, quedando casi por un siglo como relaciones diplomáticas y comerciales para Roma que siempre tuvo la isla como una posible conquista.

En aquel tiempo, 27 a. C., Augusto Cesar se convirtió en el primer emperador de Roma que pasaba a ser ahora un imperio. Con él, hubo varios intentos de conquistar Roma (en 34 a. C., 27 a. C. y 25 a. C.), pero nunca fueron realizadas, las causas principales fueron las revueltas que sucedieron en otras partes del imperio, sin embargo, Britania pagaba impuestos y se encontraba en una situación frágil entre los reinos del sur, pues estaban muy divididos mientras que por el norte estaban mucho más consolidados, Caledonia (que pasaría a ser llamada Escocia mientras que a la isla de Irlanda Hibernia). Realmente Roma se interesó en el sur.

En aquel tiempo el reino mas poderoso eran los catuvellaunos que superaron a los trinovantes y ahora pedían tributó a los atrebates que eran liderados por un descendiente del aliado y enemigo de Julio Cesar en el pasado en la Galia, Comio.

Desde tiempo atrás los romanos estaban aliados con los trinovantes, y aprovecharon la enemistad que tenían los Catavellaunos (rey Tododumno) con los Atrebates (rey Verica) para aliarse con estos mismos, así atacaron por ambas partes, este y oeste, sin embargo, Verica perdió y se marchó. Primero los romanos conquistaron a los Trinovantes y tomaron el pretesto de ayudar a los Atrebates para entrar a la isla, sin perder tiempo fueron por los Catavellaunos que resistían y a casua murió su rey y llegó al trono su hijo, Carataco, donde sucedieron las batallas de Medway, Támesis y finalmente en la capital Camulodunum. Pese a la derrota Carataco huyó y formó una nueva resistencia por el oeste.

Con esta victoria los once los once principales líderes del sudeste de Britania se rindieron a Claudio, entre ellos los de los atrébates, los icenos y la reina de los Brigantes Cartimandua. La capital para la ahora provincia fue Camulodunum y restauraron a Verica como rey de los atribates bajo la hegemonía romana.

Roma siguió expandiéndose y poco a poco tomaba el control, por el año 47 con Publio Ostorio hubo varios ataques con los aliados de Carataco, sin embargo, fueron vencidas en la Batalla de Caer Curadoc y Carataco huyó a la reina brigante que se los entregó a los romanos sin dudarlo, por suerte, el emperador Claudio le perdonó la vida.

Sin embargo, entre los años 60 y 61, cuando el emperador de Roma era Nerón, estalló la rebelión de los icenos, al mando de su reina Boudica, estos estaban descontentos por la anexión de sus territorios efectuada por los romanos y descontenta personalmente esta reina porque al fallecer su marido, el rey Prasutago, se incumplió su testamento al atribuir todos sus bienes al Imperio romano, incluidos los reservados para la familia del rey. Apoyada por otras tribus, incluida la de los trinovantes, luchó con gran dureza y consiguió saquear grandes ciudades como Camuludunum, incluso expulsar de la ciudad de Londinium (el actual Londres) al procónsul romano Cayo Suetonio Paulino que estaba en el norte llevando una campaña en la isla de Mona (actual Anglesey); un refugio de los britanos rebeldes, aunque finalmente este aplastó la rebelión en la batalla de Watling Street y aquí murió Boudica y sus hijas fueron violadas.

Tras esta revuelta, los próximos años fueron más tranquilos y Britania lentamente se convertía en una provincia de Roma. Para los romanos había mucha inseguridad por lo que constantemente había presencias militares por lo que hubo nuevas infraestructuras de las vías. Destaca también la revuelta de Caledonia culminada en la batalla de Monte Graupio del 83.

Hay muy poca información de estos años, lo que puede decir que probablemente fueron años pacíficos y de progreso de obras arquitectónicas, acueductos, vías, puentes, sistemas de alcantarillado, baños públicos o anfiteatros, lo común d ellos romanos. Destacamos algunas construcciones como las fuertes costeros como los de Portchester, Pevensey y el castillo de Burgh, castillo de Dover, muralla de Adriano (debido a los ataques de los pistos de Caledonia, esta muralla establecío la frontera de Britania), muralla de Antonino Pío o los baños de Bath, sin embargo, en Britania en aquellos años estaba un poco quedada en la Edad de Hierro.

Aparte de la capital Camuludunum (que fue remplaza por Londinium tiempo después), estaban ciudades como Calleva Atrebatum, Lindum Colonia (durante el reinado de Nerón), Eboracum (actual York), Cirencester y Glevum.

Hacia 197, se produjo una reorganización del territorio, estableciendo la división entre Britania Inferior al norte y Britania Superior. Por el 211 Septimo Severo inicio campañas militares para terminar con las revueltas de los britanos y terminó muriendo. Por el 260 la Galia se separó de Roma incluyendo Britania, dando origen al imperio galo, sin embargo, en el 274, aparte de la crisis que vivía el imperio, este volvió a someterse a Roma durante el reinado de Aureliano. Entre el 286 y 296 está la revuelta carausiana donde Britania fue independiente por diez años.

En el siglo III Britania se dividió en cuatro provincias (que luego pasaron a ser cinco) durante las reformas de Diocleciano, estas provincias quedaban en dirección de un vacario, una especie de gobernador. Fueron años tranquilos, Britania solo se veía afectada por lo que sucedía en Roma, varios emperadores intentaron independizarla de Roma, claro está en la Gran Conspiración del 367.

Y para finalizar en 407 el imperio romano (la parte de occidente) llegó a su fin tras los problemas administrativos y las invasiones bárbaras, por lo tanto, las tropas romanas de Britania se ocuparon de las revueltas dejando desprotegida a Britania, y otros pueblos germánicos aprovecharon esto y migraron allá para conquistarlas. Fueron los anglos, sajones, jutos.

PERÚ, PRIMEROS SIGLOS